Siempre que
se nos presenta una manzana a la mesa, surge el dilema, comerla con piel (cáscara), o
sin ella ?, yo siempre me la como con piel, eso sí, previo un
buen lavado.
Recientemente en la Universidad de Iowa (EE.UU), a través de sus
recientes experimentos han podido constatar que el ácido ursólico que contiene la piel de la manzana, ayuda a bajar de peso, porqué eleva los niveles del músculo esquelético y la denominada grasa marrón, tejidos
con altas tasas de gasto de energía, que a su vez favorece la disminución de peso.
Sin embargo hay muchas más razones para que nos comamos la piel de la manzana, veamoslas:
El ácido ursólico es un ácido triterpénico pentacíclico, que
junto con su isómero el ácido oleanólico, esta presente en la piel de varios frutos como la
pera, ciruela y arándano, pero es en la manzana donde hay mayor cantidad.
También en diversas plantas medicinales como en el romero,
tomillo, orégano, menta, salvia y otras más.
Variedad: Green-dragón |
Ambos ácidos son
recomendables para la prevención y tratamiento del cáncer, principalmente el de piel, puesto que inhiben el
crecimiento de los tumores.
Es utilizado
en dermatología por su acción antiinflamatoria y calmante sobre la piel (aftersun).
Estimula el
crecimiento del cabello, gracias a su efecto estimulante de la circulación sanguínea en el
cuero cabelludo, actuando también en la activación de los queratinocitos.
Es un
potente "antiaging" pues mejora y refuerza el colágeno cutáneo,
elevando la elasticidad de la piel, mejorando el aspecto de las arrugas y
manchas.
Así pues, a
comernos las manzanas, peras y demás con su piel bien limpia.
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